jueves, 6 de septiembre de 2007

PREFIERO A CRISTO!!!!!!!!!!!

Te amo amor mío, mi Rey y mi Señor!! nada soy sin ti, nada soy... Únicamente Tú eres la razón y la alegría de mi vivir, gracias por amarme, gracias por salvarme, gracias por pensarme, gracias por tu misericordia y por tu perdón, te amo mi amor, mi gran tesoro y mi fortaleza, mi felicidad y mi plenitud, te amo mi dulce Jesús, te amo!!!!!!!!!

Tú eres el único motivo de mi existir, si tengo vida es para servirte, para adorarte, para alabarte, bendecirte y contemplarte... eres el mayor anhelo de mi corazón... te amo Jesús, precioso Jesús, dulce Jesús, Amado mío, sueño mío, te adoro y por siempre te adoraré, la eternidad no es tiempo suficiente para amarte y adorarte, me rindo a ti, a tus preceptos, al suave toque de tus manos, a tu presencia y a tu amor....

TE AMO JESÚS, TU ERES MI TODO, MI DELICIA Y MI PORCIÓN, TU ERES MI HERENCIA JESÚS, TE AMO, TE AMO, TE AMO!!!!!!!!!!! TE PREFIERO A TI!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Nada soy sin ti.


Busco rendir mi humanidad desolada ante ti, quiero educar mi carne... tan sólo por alcanzar encontrar el cauce que me lleve hasta ti...

Yo quiero una vez más, reconocer y aceptar que NADA SOY SIN TI. Que por la gracia y misericordia que derramas día a día sobre mi es que hoy puedo decir que soy feliz... porque sólo anhelo encontrar el cauce que me lleve hasta ti...

Mi Jesús... mi Amado, sólo quiero experimentar tu presencia una vez más; y si algún día la realidad sea el no sentirte... tener la certeza de que a mí lado siempre estás... te amo.

Dios todo lo puede.

Todo es posible si se pone en manos de Dios. Cuando creemos que todo a nuestro alrededor se desvanece, cuando creemos que el cielo se nos cae en pedazos y que nuestro mundo está acabado, ahí estará Dios con sus manos tendidas llenas de amor y consuelo.

Si vemos algunas situaciones que nos pasan en la vida, como caminos que debimos de recorrer para ser mejores seres humanos o para valorar lo que hoy en día tenemos, sería más fácil de llevar, pues nuestra mente humana, limitada al fin, no nos permite entender el por qué de las cosas.

Si en medio de tu soledad, de tu tristeza... decides refugiarte en Cristo, que todo lo puede, Él sanará tus heridas y te llenará de la paz y del reposo que solamente en Él podemos encontrar.

Dios nunca nos da más de lo que no podamos soportar, por eso debemos ser húmildes y agradecer por lo que alguna vez tuvimos, por lo que tenemos y por lo que vendrá, por el sufrimiento que alguna vez hemos padecido y por el que estamos padeciendo porque éste nos moldeará en madurez y nos hará más fuertes y decididos.


















Bendición.

"Que el Señor te bendiga y te proteja... Que Él te mire con amor y te conceda la paz." Números 6, 24-26.